TRES REVOLUCIONES EN TERRITORIO FRANCÉS
REVOLUCIÓN FRANCESA Las desastrosas cosechas de 1788 provocaron nuevamente una carestía en el precio del grano, lo que condenó a la hambruna a buena parte de los sectores populares. En 1789, el precio del pan alcanzó límites escandalosos, lo que en una sociedad repleta de campesinos y pequeños artesanos precarios supuso una caída de los más débiles del lado del hambre y la miseria. El número de mendigos se incrementó, lo que generó una mayor inestabilidad y una efervescencia social extremadamente sensible”. Al mismo tiempo, el auge de una clase burguesa nacida siglos atrás, que había alcanzado un gran poder en el terreno económico ahora empezaba a propugnar el político. Su riqueza y su cultura la había elevado al primer puesto en la sociedad, posición que estaba en contradicción con la existencia de los estamentos privilegiados, nobleza y clero. Es 1789 y en Francia todo parece posible. Las mujeres ocupan la calle durante las semanas precedentes a la insurrecc...